LA LEY ISLÁMICA (SHARIA)
La Sharia: " Es el camino que conduce al abrevadero" es la ley Islámica formada durante la escolaridad. En el Islam, Sharia es la expresión del divino destino y constituye un sistema de deberes que son encargados a un Musulmán en virtud de su creencia religiosa".
Los sabios musulmanes la interpretan como: "Los juicios que Dios determina para que el hombre sea feliz en esta vida y en la próxima".
Y los musulmanes la prefieren sobre cualquier sistema por lo siguiente:
1. Las fuentes de donde se deriva: aseguran que Su origen es el Creador de todo, el Poderoso y Majestuoso, caracterizado por Perfecto, lejano de cualquier defecto, deseo o pasión.
En cambio el hombre es deficiente e imperfecto, ignorante acerca de lo que es mejor para él o que le perjudique, es común que el hombre sea dominado por sus intereses y sus deseos, adelantando el beneficio propio sobre el beneficio general.
2. Los propósitos: dicen que busca el mejor estado del hombre, la purificación de su corazón, la tranquilidad de su alma, su sentimiento por actuar, da suma importancia al bien familiar, a su intelecto, honor y propiedades, el establecimiento de una buena relación entre él y su hermano, entre él y su Creador. En cambio la ley del hombre busca regular las relaciones entre las personas pero omite ciertos aspectos morales y éticos en la vida del hombre, bajo el título de libertad cae en acciones que perjudican a su persona o a la comunidad, como el alcohol y el adulterio.
3. La recompensa: argumentan que la legislación islámica toma en cuenta las acciones interiores como exteriores. En cambio la ley del hombre no interfiere en casos interiores o preliminares, sino en aquellos que ya se han presentado, como violaciones hacia los demás.
4. La adoración y el efecto: para los musulmanes el legislar con ella es adoración, se recibe recompensa por ello en esta vida y en la otra, el diferenciarla merece el castigo, el diferenciarla merece el castigo en esta vida por los jueces y sabios de la legislación y en la otra próxima vida por Dios. En cuanto a los otros sistemas omiten totalmente una recompensa en la próxima vida, el obrar con ellos no es adoración, es simplemente algo mundanal.
5. El establecimiento y la continuidad: ven la ley islámica como perpetua y permanente, lo que es prohibido no puede llegar a ser permitido. En cambio la ley del hombre es cambiante respecto a las ideologías de las personas en cargo, por el cambio de la sociedad, o por los intereses o deseos del hombre, algo que hoy es permitido, en otro tiempo lo deja de ser y viceversa, es por eso que se presentan diferentes discusiones acerca de lo que es correcto e incorrecto.
6. Generalización: consideran que es para todos los hombres, tiempos y lugares. Del mismo modo creen que encierra todos los aspectos políticos, económicos, militares, sociales y culturales. En cambio la del hombre necesita constante renovación.
Por consecuencia, creen que la diferencia entre la Sharia y los otros sistemas o leyes de los hombres, es una diferencia como el Creador y Su Creación.
La ley islámica cubre todos los aspectos de la vida del musulmán.
Aquellas leyes islámicas que están expresamente descritas en el Corán se denominan Hudud. Incluyen la prohibición del homicidio, relaciones sexuales extramaritales, consumo de alcohol y juegos de azar.
El Corán también detalla leyes relacionadas con la herencia, el matrimonio, la compensación en los casos de homicidio o daños físicos, así como reglas para el ayuno, el azaque y la oración. Los preceptos y prohibiciones son interpretados en la práctica por los eruditos en religión o ulemas.
Otros aspectos legales son dirimidos por los Takzir o Jueces. Se les da el poder de dictar sentencia siempre que se atengan a los principios del Corán y la Sunnah. La ley islámica es directamente aplicable cuando la constitución del país involucrado así lo establece, como es el caso de Arabia Saudita o Irán. De otro modo, se aplica la legislación sancionada por el estado, que, según el caso, puede coincidir en mayor o menor medida con la Sharia. |